
La Ertzaintza ha detenido en Sestao a uno de los supuestos integrantes de una banda de delincuentes implicado en una decena de atracos a gasolineras vizcaínas en los últimos tres meses, según ha informado el Departamento vasco de Interior.
La detención se produjo ayer por la tarde cuando agentes de la Ertzaintza arrestaron a M.S.G., de 19 años, acusado de participar en una serie de atracos a diferentes gasolineras del territorio vizcaíno en los últimos meses. Además de los asaltos a las gasolineras, al integrante de la banda se les imputan también varios robos a punta de pistola y con arma blanca llevados a cabo en varios comercios vizcaínos.
El 'modus operandi' de esta banda comenzaba con la sustracción de un turismo para cometer los robos que utilizaban para realizar 'alunizajes' y acceder al interior de las gasolineras. En otras ocasiones hacían saltar las verjas metálicas de las puertas de acceso tirando de las cinchas tras atarlas a la parte trasera del automóvil. Una vez en el interior se apoderaban del dinero o se llevaban consigo la caja registradora. Tras llevar a cabo los asaltos, los atracadores abandonaban los vehículos. En ocasiones llegaban a prenderles fuego para eliminar cualquier tipo de rastro o huella.
Recordemos que la legislación vigente ya establece unas normas de seguridad específicas que todas estaciónes de servicio debe cumplir. "Los expendedores no pueden llevar mucho dinero en efectivo, por ejemplo, por lo que si les atracan, tampoco se van a llevar mucha cantidad suele haber algún que otro robo, pero normalmente son hurtos pequeños en la tienda¨. Pero ultimamente, con pistola incluida se estan produciendo atracos". En este sentido, cada vez son más violentos y eso te hace temer por los empleados".Por este motivo, y tras recordar que el pasado año se sufrieron otros atracos en las estaciónes de servicio, se reconoce que "estan un poco cansados de tantos problemas .Las gasolineras "son el lugar de referencia para estas cosas porque saben que hay dinero en efectivo". Sin embargo, resalta que "las medidas de seguridad impiden que los empleados lleven mucho dinero encima y no tienen acceso a la caja fuerte". Pero reconoce que "la peor parte se la llevan los trabajadores porque el susto lo llevan en el cuerpo. Por eso, señala, "está claro que el dinero es lo de menos".
Se debera buscar solucciones de la gestion del efectivo de pequeñas cantidades de dinero que quedan en mano de los expendedores o movimiento de dinero de las tiendas.
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